Israel aborda el barco “Estelle”, otro relevo de la “Flotilla de la libertad”

El régimen israelí ha abordado hoy, en torno a las once de la mañana, el barco “Estelle”, que trataba de alcanzar las costas de Gaza y romper el bloqueo, en señal de repudio contra el férreo cerco de Israel.

En la embarcación, redirigida a un puerto israelí por el ejército, viajaba una treintena de activistas propalestinos, la mayoría europeos, incluidos tres españoles: actualmente todos ellos se encuentran detenidos, según informan los organizadores de la expedición.

“Miembros de la Marina israelí han abordado el navío “Estelle”, que se dirigía a Gaza con el objetivo de romper el bloqueo marítimo de seguridad”, informa el ejército israelí en un comunicado. Precisa, asimismo, que “no ha sido necesario el uso de la fuerza” y que la tripulación, una vez llegue al puerto israelí de Ashdod, quedará “bajo custodia de la policía israelí, las autoridades de inmigración y el ministerio de Interior”.

El barco transportaba toneladas de ayuda humanitaria para la Franja de Gaza y “navegaba sin problemas hasta que fueron rodeados por cinco o seis lanchas en las que viajaban soldados con máscaras antigás”, informa por teléfono un portavoz de la organización de la campaña Rumbo a Gaza: el abordaje se produjo “a 36 millas” de las costas de Israel.

En mayo de 2010, el Ejército israelí abordó “en aguas internacionales” el barco «Mavi Mármara» y acabó con la vida de nueve activistas, también hubo más de 50 heridos: formaba parte de las seis embarcaciones de la llamada “Flotilla de la libertad”, integrada por activistas de todas partes del mundo: políticos, premios nobel, periodistas e intelectuales.

En julio de 2011, doce barcos y dos cargueros salieron de Grecia con ayuda humanitaria e intentaron de nuevo romper el bloqueo, pero fracasaron en su objetivo.

Israel cerca Gaza desde que en 2007 HAMAS se hizo con el control de la Franja, impide la libre entrada y salida de personas y mercancías, también el acceso de embarcaciones, lo que ha provocado una crisis humanitaria sin precedentes en la zona, amén de violar impunemente el derecho al trabajo, la salud, la educación y la libre circulación de sus más de millón y medio de habitantes.