Ataques sion-terroristas en La India y Tailandia y...

Confesiones de una hermana y amiga palestina, hija de un nacionalista musulmán palestino y combatiente por la libertad.

Escribo mis pensamientos y/o puntos de vista en respuesta a los recientes ataques terroristas perpetrados por Israel en La India y Tailandia, incidentes que quieren imputar a la República Islámica de Irán. Algunos dicen que el mundo va a experimentar otro “momento” judío / israelí con un ataque de bandera falsa, el cual marcará el comienzo de la Tercera Guerra Mundial, ya que el conocido Imperio Talmudista lo desea y necesita ver destruidos a todos aquellos Estados que se atreven a desafiar la supremacía judía y su dominación.

Estos talmudistas han sido, durante siglos, (y son) terroristas, perversos, asesinos y estafadores o defraudadores; sin embargo, ellos creen haber alcanzado el pináculo de su ideología racista de “elegidos” (no se sabe por quién) y que la construcción de ese su templo “pagano” en el Jerusalén palestino será grabado en piedra como el dominio del imperio judío a lo largo de todo el mundo.

Y mientras, los no-judíos, esos burros y bestias de carga, “que, nacieron tan sólo para servirnos, sin esto, no tienen cabida alguna en el mundo, sólo para servir al Pueblo de Israel ", como muy bien dijo el Rabino Ovadia Yosef.

Estoy, en este mismo momento aquí, avergonzada de ser tanto una musulmana como una árabe, cuando veo cómo se comportan nuestros gobernantes e incluso nuestros eruditos "islámicos", muchos de los cuales son igual de corruptos que sus líderes. La torsión y distorsión de la verdaderas enseñanzas y el significado del Islam son de hecho un delito y una afrenta a nuestra nación, ya que inclinan la cabeza como muestra de sumisión ciega a los esclavos judaicos ocultistas, en lugar de a Dios.

La debilidad y la subordinación al Occidente colonial, a los judíos, (no sólo a los sionistas y a los "ismos"), es la razón por la cual los musulmanes de hoy en día están sufriendo una perversa muerte y una destrucción desproporcionada, por haber permitido que estas bestias judías pudieran dominar nuestro país, para difamar, en un primer lugar, a nuestra religión, (y al cristianismo también, obviamente) nuestra fe en Dios; y, en segundo lugar, traicionar a nuestra gente, nuestra cultura y la historia ancestral, de los que deberíamos haber estado tan orgullosos. Sin embargo, nos dimos la vuelta y dejamos al mal penetrar y saturar nuestra sociedad, lo que ha permitido al diablo caminar libremente por nuestro País, que trágicamente se ha convertido en lo que es hoy en día, un cementerio viviente.

Nosotros, la nación musulmana, a través de nuestros gobernantes corruptos y ocultos, instalados por los occidentales, tenemos la culpa por no proteger y preservar a nuestro Dios-Nación, dado que hemos fracasado en mantener nuestra dignidad, nuestro honor, nuestra humildad y nuestro orgullo. El mundo entero se enfrenta al mismo enemigo. Bueno, todo lo que puedo decir es esto, para aquellos de ustedes que elijan compartir lecho con los judíos en aras de la "corrección política", "la tolerancia entre la Fe" (a la vez que están apuñalando a todos por la espalda y demonizando nuestra fe y a nuestro Profeta) y ante el temor de ser falsamente etiquetados como "antisemitas" (un término que debería aplicarse al 99 % de falsos judíos askanazi de hoy), permanecen mudos y ciegos por las sábanas ensangrentadas detrás de las cuales deciden esconderse.

Yo, con la sangre semita que corre por mis venas árabes, prefiero reconocer a quien nos enfrentamos verdaderamente, arruinándonos políticamente, económicamente, moralmente, socialmente y religiosamente, pese a que ya nos advirtieron de ello varias veces tanto Cristo, la paz sea con él, como en el bendito Corán.

Todos ustedes pueden decidir el rechazarme, criticarme e insultarme, pero yo permanezco firme y fiel a mis principios, así como a mi Profeta Muhammad (saws), que me hizo ser, al igual que mi padre, una nacionalista musulmana palestina y combatiente por la libertad.

Corán 4:155-159 Sura an-Nisa (las mujeres)

(Ellos han incurrido en la cólera divina): en que rompieron su pacto: que ellos rechazaron los signos de Alá, que mataron a los enviados en desafío del derecho, que dijo: "Nuestros corazones están las envolturas (que conservan la Palabra de Alá, no necesitamos más) ", más aún que Alá ha puesto el sello en sus corazones por su blasfemia y poco es lo que creen.

(Jn. 8:43, 44).

Jesús le dijo [a los judíos]: “¿Por qué no entendéis mi lenguaje?  Porque no podéis escuchar mi palabra.  Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer.  Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él.  Cuando dice mentiras, habla de sí; porque es mentiroso, y padre de la mentira”